martes, 29 de septiembre de 2009

Love is in the air...


Acostada en mi cama de 1 plaza (aun no tengo las lucas pa una más grandecita, aunque parece q me endeudaré para obtenerla). Son las 11 :29 am. Acabo de hablar por msn con una amiga, que me cuenta novedades de una situación romántica producto de mi directa pero discreta intervención. El amor romántico y los entusiasmos corporales comienzan a tomar vuelo esta primavera. Y yo, cumpliendo un rol que me entretiene mucho: el de Celestina. Me ha ido bastante bien en mi desempeño. He logrado varios pololeos y un matrimonio q ya lleva varios años y tres hijos.

Es todo un mundo éste, el de los solteros con ganas de emparejarse. A partir de un sólo encuentro comienza la función: amiga encantada con amigo, amigo fascinado con amiga, inventa algun carretito pa verle de nuevo, averigua q piensa de mí, si le caí bien, ¿será una buena persona?, ¿fuma? ¿qué edad tiene? Ay, es más chico q yo (dicen las nenas), q lata! Y ahí yo convenciéndolas de q para el amor no hay edad, q no se cuestionen tanto las cosas y q vivan el presente. Los amigos, mis machos recios, comentando sobre mis amigas, que tal estaba bien rica, q si es buena onda, q si yo creo q pueda él gustarle a ella, q se enamoraron (wtf???). Y yo advirtiéndoles q si van a puro jugar con ellas, mejor ni se les acerquen (aunque considero q el juego es importante en la vida de toda persona... como dicen las Azúcar Moreno: "sólo se vive una vez!")

Por ahí me dijeron q yo era de otro planeta (la Javi me dijo "marciana"), q era única en mi especie. Y yo q me considero re normal, aunque al compararme con mis pares, parace q no es tan así. No sé. Lo único q sé es q una nunca sabe cuándo se va a morir, y q si se cuestiona mucho las cosas, pierde su tiempo y no disfruta de la vida. Si las cosas se dan, y llegan oportunidades (románticas o de otro tipo), hay q tomarlas, si se tienen las ganas, hay q darle al asunto y no ponerle taaaaaanta cabeza, tanto análisis. Total, cuando llegue el amor verdadero y definitivo, será evidente y no podremos escapar de él. La vida es hoy, es un regalo q hay q agradecer día a día, es una bendición. El q se niegue a disfrutar y se lo cuestiona todo en demasía, se queda inmóvil y no vive las hermosas y divertidas experiencias q sólo te da el mero hecho de vivir. Así que, amigos y amigas, ¡vivan la vida!